Soy María Canales, Arquitecta y Consultora de Feng Shui clásico
A lo largo de mi trayectoria profesional como Arquitecta, siempre ha estado presente la inquietud por el respeto de la naturaleza, cómo diseñar de una forma sostenible y eficiente o cómo mejorar la calidad de vida de mis clientes a través de los espacios que habitamos.
En todos mis años de experiencia profesional, he profundizado en diversas materias como la bioconstrucción, con el objeto de evitar la toxicidad de los materiales y proporcionar un entorno saludable y conectado, en la medida de lo posible, con la naturaleza.
Ha sido consecuencia de mi constante curiosidad por como los espacios nos afectan, que de forma autodidacta me he ido formando en Neuroarquitectura, campo absolutamente fascinante que nos descubre cómo actuamos, nos sentimos y reaccionamos en respuesta al espacio construido.
Hasta aquí, todo normal, ¡o no!, según con quién me compare.
El hito que marcó la diferencia sucedió en 2010, cuando a través de un amigo que había encargado un estudio Feng Shui analizaron hechos que habían ocurrido en su vida. Siempre había creído que Feng Shui era una simple tendencia decorativa y, al ver el estudio, descubrí que nada tenía qué ver con la decoración sino con la naturaleza, sus ciclos y cómo estos afectan nuestra vida.
De manera que, como imaginareis, empecé a estudiar Feng Shui sin pensarlo dos veces. Como todo en la vida, el profesor es la clave y yo tuve la mejor de las suertes al elegir a los míos, no solo por su conocimiento sino por su calidad humana.
Tras los primeros pasos empecé a aplicarlo observando cosas que me costaba creer, incluso explicar. Teniendo en cuenta que mi mente fue estructurada en lo racional, lo cierto es que me costaba mucho racionalizar los resultados. Todavía me cuesta aunque intento no hacerlo.
Lo que es, simplemente es. No puedo explicarte más en este breve texto de presentación.
De manera que aquí estoy tras 14 años de fascinación, aprendizaje y experiencia ofreciéndote que tú también puedas conocer sus influjos y aprovecharlos para tu beneficio y bienestar.
¡Ojalá te animes a comprobar todo lo que el Feng Shui puede hacer por ti!
Un abrazo,